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Estando en modo crecimiento, el mercado aeroespacial comercial enfrenta retos únicos al frente de aduanas actualmente. Aquí están los mayores obstáculos y cómo un proveedor de logística fiable puede ayudar a los fabricantes aeroespaciales a optimizar sus cadenas de suministros.
Los fabricantes de industrias aeroespaciales tienen demasiadas cosas en la cabeza en este momento. Desarrollar los requerimientos de los clientes, la acumulación de órdenes, la escasez de trabajadores, los conflictos de los aranceles y una alta demanda de materia prima como el acero y el aluminio están llevando a las compañías a reconsiderar las estrategias de gestión de su cadena de suministros.
Agregue un montón de regulaciones, requisitos de cumplimiento y reglas de aduanas a esa lista —todo eso puede desacelerar la cadena de suministros y tomar una gran porción de las ganancias del fabricante de la industria aeroespacial.
Sector en Desarrollo = Más Complejidades en la Cadena de Suministros
Siendo un sector que alcanzó los $685.6 billones de dólares en ventas globales el año pasado según Deloitte, los desafíos de logística para industrias globales aeroespaciales y de defensa no se limitan a las nuevas reglas de la Protección de Aduanas y Fronteras (CBP por sus siglas en inglés) y los requisitos de cumplimiento de aduanas.
En general, compañías como Boeing, Airbus, Lockheed Martin, General Dynamics, y United Technologies Corporation (el Top 5 de Deloitte por ganancias) también están lidiando con cadenas de suministros más complejas, altos niveles de competencia y el tipo de reglas de regulación que —si no se siguen— pueden llevar a multas y sanciones serias.
Aquí hay tres preocupaciones de cadena de suministros que mantienen despiertos en la noche a los líderes de la industria aeroespacial justo ahora:
#1: La gestión de la Cadena de Suministros se está volviendo cada vez más compleja. Los retrasos de los productos, el exceso de costos y la creciente necesidad de entregas puntuales le están pasando factura al balance del sector aeroespacial.
Grandes compañías como Airbus y Boeing, por ejemplo, dependen mucho de los OEM y los MRO, los cuales no todos poseen la experiencia interna de aduanas necesaria para poder navegar las complejidades del ambiente de importación/exportación. “Los proveedores de niveles dos y tres, junto con las compañías de mantenimiento y reparaciones, son expertos en los servicios especializados y la producción de partes,” dice Michael Anderson, Director del Área de Aduanas de DB Schenker, “pero a menudo buscan consejos y direcciones respecto a los asuntos relacionados con la tasación, programas de labor civil de aeronaves, clasificaciones o problemas de autorización.”
El modelo aeroespacial en sí agrega un nivel interesante de complejidad a la cadena de suministros. En la cima de la cadena alimenticia está el fabricante, el cual cuenta con un número finito de partes para construir un sólo avión.
Esas partes las construyen los proveedores de niveles 1, 2 y 3, quienes producen pequeños lotes de productos para aviones (comparado con la línea de ensamble automotriz que produce miles de autos cada año). Debido a que una orden atrasada puede propagarse por toda la cadena de suministros, seguir los requisitos de aduanas y acatar las reglas se vuelve más crítico que nunca.
Finalmente, el área de reparaciones del mercado aeroespacial (esto es, rotables bajados de los aviones, reparados y luego reinstalados) crea su propio conjunto de desafíos logísticos para los fabricantes. Eso es porque el número de estaciones de reparación que tiene esta capacidad de reparación son limitadas, y esos talleres a menudo son muy pequeños y tienen capacidades limitadas para gestionar la complejidad del ambiente actual de aduanas.
“Estos talleres de reparación trabajan con productos de un valor muy alto que requieren reportes muy complicados,” dice Tanguy Largeau, Encargado del Mercado Vertical Aeroespacial de DB Schenker. “Esto inyecta incluso más complejidad a la cadena de suministros que ya era complicada.”
#2: La competencia está aumentando tanto en el mercado doméstico como en el internacional. Justo ahora, Boeing y Airbus dominan el mercado fabricante de aviones de fuselaje ancho, pero la competencia en el lado del mercado de aviones de fuselaje angosto está aumentando entre los participantes clave como COMAC, Mitsubishi, Bombardier y Embraer.
Tanguy apunta a la de tendencia reciente de incorporaciones y absorciones (M&A) (como son, Rockwell-Collins y United Technologies, Safran y Zodiac) como prueba de que la competencia está aumentando en ese sector. Mientras que esa tendencia continúa, el número de participantes más pequeños que se incorporan codo-a-codo en la cadena de suministros se multiplicarán. Mover mercancía de una manera que cumpla con todos los requisitos normativos no se hará más fácil. De hecho, probablemente se volverá más difícil en el futuro cercano.
“Este es un sector del mercado que tiene que tener el equipo adecuado en el lugar correcto y en el momento correcto —todo el tiempo,” dice Anderson. “A diferencia de los suministros no-perecederos o de inventario que pueden pasar seis meses en una repisa de un almacén, cualquier atraso en las entregas de partes aeroespaciales se traducen en aviones anclados.”
Los fabricantes aeroespaciales también necesitan niveles extremadamente altos de visibilidad de la cadena de suministros —algo que no siempre es fácil de alcanzar con procesos logísticos tradicionales. Y las compañías aeroespaciales necesitan saber que la documentación siempre es correcta para evitar atrasos de transporte costosos.
“Se trata de saber dónde están tus productos y quiénes son tus proveedores,” dice Anderson, “y la calidad de las partes que están proveyendo. Sin estos conocimientos, la cadena de suministros aeroespacial se vuelve ineficiente bastante rápido.” Trabajar con un proveedor de logística confiable que tiene una profunda experiencia de importación y exportación puede ayudar a aliviar estos puntos críticos.
#3: Complejas regulaciones gubernamentales y de la industria que siempre están cambiando y pueden crear atrasos en la cadena de suministros o requieren recursos adicionales que tienen que especializarse en competencias no centrales de una compañía aeroespacial.
El nuevo programa Proyección Avanzada de Carga Aérea (ACAS por sus siglas en inglés) ahora es un requisito. La intención de este programa es mejorar la seguridad de las aeronaves y los pasajeros en los vuelos destinados a los EE.UU. Esta medida de seguridad es para el transporte aéreo lo que es la Declaración de Seguridad del Importador (ISF por sus siglas en inglés) para el transporte marítimo. Esta información se debe enviar de manera electrónica a la Protección de Aduanas y Fronteras (CBP) de EE.UU. antes de que el cargamento salga de los países extranjeros a los EE.UU.
“En el 2010 se estableció la ISF por la CBP para revisar mejor la relación entre el expedidor y los clientes, como un intento de asegurar las fronteras de EE.UU.,” dice Anderson. “Ahora los elementos de datos del ACAS reportan el expedidor, el consignatario, la descripción de la carga, peso y cantidad. Las compañías de transporte aéreo deben reportar estas cosas junto con una lista de números de aterrizaje antes de que los envíos se carguen en los aviones.”
Las compañías también deberían estar informadas del programa de Comerciantes de Confianza de Aduanas de EE.UU. Este nuevo programa, que está actualmente en la Fase II de un programa piloto, ofrece relaciones mejoradas con la CBP al integrar Autoevaluación del Importador (ISA por sus siglas en inglés) y sobre el programa CTPAT. En septiembre, la CBP resumió una lista de beneficios propuestos para este programa, y moviéndose a la Fase III el próximo año con socios de comercio selectos.
“Los expedidores podrían percatarse de los posibles beneficios del programa con aduanas,” dice Anderson, quien agrega que tanto el TTP como el ACAS están “surgiendo muy rápido” y, por definición, debería ser un interés clave para los fabricantes aeroespaciales que están importando bienes a los EE.UU.
Mientras que los sectores aeroespaciales y de defensa continúan expandiéndose, la cantidad de complejidades de aduanas asociadas a estos expedidores seguramente crecerá exponencialmente. Al aliarse con socios de logística que entienden estas complejidades —y que saben cómo navegarlas— las compañías aeroespaciales pueden evitar interrupciones tanto grandes como pequeñas de la cadena de suministro, mantener la empresa proveyendo y preservar sus balances.